Ya nos lo venía anunciando Fucker Mate desde hacía unos días, el regreso al porno de un chaval con un pollón gigante. Unas siglas tatuadas sobre su torso musculadito y un rabo largo y tremendamente gordo hecho para reventar culos. ¿Quién podía ser? Pues David Montenegro.
Ya hace algo más de tres años que dejamos atrás a un yogurín que estaba buenísimo y que sabía perfectamente cómo dar buen uso a su herramienta en la cama, dejando satisfechos a todos los culos que empitonaba. No ha cambiado nada. Sigue estando igual de bueno, teniendo esa misma mirada de pillo que lo caracteriza y por supuesto conserva el pollón en plena forma, duro, gordo y grande tal y como lo recordábamos.
Ya sea tieso a punto de petar un ojete o morcillón colgando encapuchado con una longitud de un cuarto de su pierna, el gusto es perderse en su mirada de vicio y sus labios para después ir bajando por su suave torso, detenerse en su ombligo y encarar al monstruo que lleva entre las piernas, que tiene que ser alucinante notar crecer en la boca con el cipotón rellenándotela enterita.
@ fotografía por Mano Martínez